domingo, 18 de noviembre de 2018

¿Quiénes somos peruanos?


Peruanos, a simple vista somos como todos.


Pareciera que el Perú no solo fue sino que sigue y quedó colonizado por extraños, de lo contrario no se entiende ese constante abandono de la población indígena ¿O será que muchos piensan que esos no deben seguir siendo considerados peruanos? ¿Quiénes son los peruanos? ¿Los que tienen nombre gringo? ¿Los que se ríen del idioma quechua sin entenderlo? ¿Los que promueven el país como una "marca" y creen que todo se debe vender? ¿Los que quieren ser o son rubios? ¿los de pelo negro? ¿Los crespos? ¿Los lacios? ¿Los teñidos? ¿Los pelados? ¿Los que creen que los indígenas y su folklore solo son elementos turísticos? ¿Los de apellido autóctono? ¿Los de apellido traducido? ¿los de apellido extranjero? ¿Los de apellido compuesto? ¿Los que apoyan ese "progreso" que solo deja contaminación y miseria para los pueblos y coimas para las autoridades? ¿los que tienen plata? ¿Los misios y los chihuán? ¿Los que tienen títulos falsos?
¿Son más peruanos los de la costa? ¿los de la sierra? ¿los de la selva? ¿los que rotaron? ¿Los que invadieron antes y son "señores" o los que invaden ahora y son rascuachos?
¿Los católicos? ¿Los conversos? ¿Los ateos?
¿Los que van a la procesión? ¿Los que dan todo por el fútbol? ¿Los que aman a Carhuancho? ¿Los que admiran a Rata Gorda? ¿Los que cobran por marchar? ¿Los que meten la mano en el avión o los que ceden el asiento en el bus? ¿Los sapos o los respetuosos?
¡Tantas cosas nos dividen! ¿Y por qué? ¿Qué será lo que nos pasa?
Porque teñidos, pelados, gordos y flacos hay en todas partes. Morenos, blancos y coloridos también se ven en cualquier país, pero no en todos se discrimina abiertamente como en nuestro pedazo de planeta. Hay países en que  a todos - vivos y o no tan vivos -se les respeta y se les da un trato similar al de cualquier otro ciudadano; pero nosotros estamos metidos hasta el cuello en tantos conflictos que parece que nos sobrara el tiempo para dedicarlo a esas cosas secundarias y las hacemos parecer primordiales.

Todos los mencionados y muchos más somos los peruanos, lo que a veces falta es apreciar y celebrar la variedad con todas sus consecuencias y sus ventajas, y sobre todo, ante la duda o desconocimiento, guardar el debido respeto, porque si uno es el que ignora no está en situación de burlarse ni menospreciar al otro, eso solo pone en evidencia, además de la ignorancia, la falta de consideración. El más patético ejemplo es la burla que hacen del idioma quechua precisamente algunos de los que no lo conocen, cosa que de verdad nos debería avergonzar a todos y no aplaudir ni celebrar esas tristes ocurrencias. 

Arriesgo una hipótesis: Veníamos mal, con el choleo y los demás prejuicios; hasta Nicomedes Santa Cruz lo reflejó en sus poemas, ni qué decir de Santos Chocano, Abanto Morales y muchos más; el choleo era parte integral de nuestra idiosincrasia y contra eso luchábamos, entonces vino la globalización y nos agarró calatos, todavía sin identidad definida. Por eso estamos así, confundidos.

- No señor ¿Acaso no sabe del orgullo que nos da la culinaria? Solo un ejemplo.

- Con eso nomás no alcanza, y encima la discriminación se metió también allí. Todo lo contamina.

Se ve por todas partes; se luce en el Congreso donde un padrastro de la patria se burla de un colega por expresarse en el idioma andino - "habla bonito, pé oy" - fue la frase digna de un delincuente que usó para "disminuir" al otro.
En el mejor de los casos se sobrepone la forma al fondo, se vacía de contenido la cultura para adecuarla al consumo rápido y apurado del turista o del "comprista"; nada se respeta, todo tiene precio, ya no queda más valor que el del vil dinero.

- Pero eso ya es mundial, no solo nosotros.

- Sí pues, ya le dije, y aquí es peor: la globalización nos agarró calatos. 


Soneto ingrato


No te conozco querida
patria de tantos amores,
te presiento entre rumores
pero ya no eres la misma;

si es culpa de mis temores
que me hacen verte distinta,
perdóname patria mía,
si pienso cosas peores.

Me iré y dejaré olvidados
dulces sueños de mi infancia
que nunca fueron logrados,

tal vez desde la distancia
los sentiré realizados
con generosa abundancia.
~

1 comentario:

  1. Ricardo, voy a empezar por decirte que tu poema es real y melancólico, porque la pureza que antes había en las ciudades y pueblos de la sierra, ya no exite, hay un exodo permanente hacia las ciudades grandes de la sierra y más aún de la costa, las cuales muestran otra cara, por la avalancha de gente de provincia, esto no está mal porque es gente emprendedora, llegaron a la ciudad con una mano adelante y otra atrás, y pasados unos años ahora son los nuevos millonarios, ¿Porqué?, porque ellos no tuvieron vergüenza de hacer tareas que los de la ciudad las teníamos a menos.

    En el aspecto social hay una discriminación solapada, o ya de ver las caras nos hemos acostumbrado a conocer el verdadero rostro del Perú, mientras el campo al cual se le tuvo siempre olvidado, recién ahora lo están valorando, pero ya no hay, te repito, esa pureza del indígena bueno e inocente, también han cambiado llevados de la mano por los oportunistas comunistas criollos.

    Todo ha cambiado
    Fernando Atala

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