domingo, 18 de marzo de 2018

Premonición


Los sueños


http://www.jggweb.com/2007/09/26/hacia-el-destino-2/


Recibió un mensaje de una amiga a la que no veía desde hacía bastante tiempo: ¿Estás bien? - le preguntaba - porque anoche soñé contigo y parecía tan real que me asusté.
Él sintió una mezcla de agrado con algo de comprensión; lo primero porque de alguna manera ese sueño significaba que estaba presente en alguien, sobre todo en quien consideraba una persona especial; y lo segundo porque no creía en premoniciones ni en sueños.
Se apresuró a responder que estaba bien, no quería que ella, la antigua amiga, sufriera ninguna angustia si él podía evitarlo con solo una respuesta, y aprovechó la correspondencia para dedicarle algunas frases cariñosas a quien no llegó a ser nada más que amiga; en circunstancias distintas tal vez la historia también sería diferente; pero no, la realidad era la que era y a ambos les había ido bien en varios sentidos; por eso la conversación se inclinaba hacia la fácil confianza de dos amigos que se aprecian y se sienten cómodos el uno con el otro. El uno con la otra en este caso.
Ella agradeció la respuesta y él se fue a descansar temprano porque al día siguiente le esperaba una jornada recargada de trabajo.

Amanece - que no es poco - él se viste, desayuna y sale dirigiendo por una avenida de doble tránsito hacia la autopista diecisiete: ignora porqué tiene ese número y también ignora que el conductor del camión que viene en sentido contrario se acaba de dormir al volante.
No atina a hacer nada. Todo desaparece, se acabó.

Alguien, lejos de allí, relee un mensaje que dice: Estoy bien, sueña conmigo cuando quieras, tal vez nos encontremos en uno de esos sueños.




Premonición


¿Los sueños, las estrellas o las nubes
tienen palabras en ellos escritas?
¿Cómo adivinar esas fortuitas
advertencias que el sentido eluden?

Del destino secretos mensajeros
pueden ser las cosas más sencillas,
no vemos si se acercan a una orilla
del río de la vida, los barqueros.

¿Saben ellos a donde nos dirigen,
o ignoran también como nosotros
si existen reglas que el destino rigen?

Si estamos al azar abandonados,
nuestro libre albedrío nos permite
creer que algo en la vida hemos logrado.
~

2 comentarios:

  1. Lo bueno viene en fraqsco chico, dicen, y en este caso es absolutamente cierto, bonito el cuento y bonita la poesía, te felicito Ricardo.

    Fernando Atala

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  2. Recordado Ricardo, siempre interesante tus artículos, te felicito y no dejes tus comentarios para satisfacción de tus amigos. Un abrazo

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