MESURA
¡Me
lleva! ¡Qué caray! ¡Ruina execrable!
Cosa
más grande no hay que los insultos,
los
hay vulgares y los hay muy cultos
que
dan también placer inigualable.
Mantengámonos
en nuestro buen nivel
sin
llegar a extremos del ultraje,
pues
quien sabe cambiándoles el traje
nos
permitamos usarlos a granel.
Porque
hay ocasiones que ameritan
una palabra fuerte y contundente,
y
aunque no hagamos caso de la gente
mejor
será evitar lo que critican.
Condenada,
perversa, detestable,
depravada,
trepadora y meretriz,
furcia
disfrazada, buscona, lombriz,
deficiente,
amoral y reprobable
Para
ellos no faltarán palabras
como
memo, mequetrefe y retrasado,
subnormal,
inculto, atocinado,
coprófago,
ceporro o chupa-cabras.
Botarate,
bellaco o calabaza,
bribón,
disoluto y energúmeno,
(género y cantidad variar se puede)
cenutrio,
cretino y comadreja.
¡¿Qué
pasó?! ¿qué tanta cosa es ésa
que
viene a perturbar la santa calma,
que
mi paciencia enorme ya la colma
y
hasta a mi tolerancia deja tiesa?
No
pasa nada, es solo un ejercicio,
para
ir practicando qué te digo
si
me llega a cansar tu desvarío
y
tu idiotez me hace perder el juicio.
~
o ~
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