domingo, 26 de mayo de 2019

Una locura deseada


Imagen: unrespetoalascanas.com/tag/pensador/


Cuentos de locura, de amor y de muerte*
*Título prestado de Horacio Quiroga.

"Sería una locura cerrar el Congreso", dicen precisamente quienes con su accionar mezquino y rastrero han llevado a la mayoría de la población al borde de esa locura de desear el tan esperado, imaginado y soñado cierre, y no es solo eso, hay varios seriamente comprometidos en actos indiscutiblemente delictivos y que para mayor desgracia parecen estar siempre en condición mayoritaria, de lo contrario no se explica cómo es que la lucha de todo un pueblo no  consigue hasta ahora ningún resultado en ese sentido.
No hay duda de que el Congreso es el principal baluarte de la democracia -no estoy jodiendo, en serio lo digo - es la institución democrática por excelencia porque sus miembros son los representantes directos del pueblo ¿Qué está pasando entonces? Simplemente que estos, en su mayoría, se han infiltrado en esa noble (en teoría) institución solamente para llevar a cabo sus delitos y crímenes con mayor poder, medios, comodidad y sobre todo protegidos por la anacrónica inmunidad parlamentaria que se ha convertido en simple y llana impunidad que aprovechan estos peligrosos delincuentes.
Encima, como en todo organismo compuesto por pluralidad de individuos, han desarrollado una solidaridad basada en el temor a la justicia, una solidaridad de delincuentes, un espíritu de cuerpo que los hace defenderse unos a otros mientras la situación de el o los comprometidos no sea completamente insostenible; solo en ese caso se les suelta la mano y se deja que la muchedumbre los destroce, si puede, porque tampoco es tan sencillo: está la presunción de inocencia y por consiguiente las fuerzas policiales deben desempeñar el triste papel de protectores de criminales, siempre contra el pueblo que ya a estas alturas quiere hacer justicia por mano propia, lo cual de sobra se entiende.

- Está soliviantando a la gente, oiga usted.

- No señor, la gente hace rato que ya está soliviantada, lo que pasa es que no se nota mucho porque no tiene poder de fuego.

Continuando ¿Si se cierra el Congreso estaríamos en una dictadura? depende, no se entusiasmen, porque se puede, y se debe, convocar a elecciones para reemplazar al que se ha cerrado, o sea que se cambiarían mocos por babas. Porque siempre serán los representantes del pueblo, cuando llegan, y al cabo de cierto tiempo se olvidan de ese pueblo al que ya solo ven como a su principal enemigo; así han sido casi todas nuestras democracias hasta ahora.
Pero no se puede negar que algún efecto positivo ha de tener eso de escarmentarlos de vez en cuando, para que no se propasen tanto como lo están haciendo mientras se ríen en nuestra propia cara... ya les va a tocar, ya se ve, ya se siente, ya se espera...

Eso en cuanto a la locura. El cuento de amor es ese de la que iba al SIN porque "ese hombre" estaba enamorado de ella... ¿Cómo! él se enamora y ella va ¿para qué? para darle su correspondiente dosis de "chamico" para que siga enamorado... todo puede ser; ya tenemos locura y amor; la muerte, de ese título prestado de Horacio Quiroga, es la que sufren cada día -lenta o rápida - las víctimas inocentes de esos malos gobernantes, legisladores , jueces y demás representantes de esta payasada mal vestida de democracia.
Es todo por hoy.



"Sería una locura cerrar el Congreso"

Soneto soñador


Pero qué bella locura
la que ellos mismos sugieren,
qué esperaban, qué se creen,
si es la aspiración más pura:

ver cerrado ese chiquero
(con el perdón de los chanchos)
el cargo les quedó ancho
y no digo porque quiero,

el clamor al que me adhiero
es enorme y es concreto:
Que se cierre ese puerquero.

Para nadie es un secreto
su traficar tan grosero,
ya ni lo escribo: LO EXCRETO.
~

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